En pleno lío entre Euroliga y Fiba por la hegemonía de las competiciones continentales poca gente se ha enterado de que ya tenemos ganador de la Fiba Eurocup Cup, lo que viene siendo la Eurochallenge de toda la vida. Un campeón alemán, Fraport Skyliners, que demuestra que el auge germano sigue carburando (como también ha demostrado Brose). Llamados así por compromisos publicitarios, afincados en Frankfurt desde 1999 y en la élite germano-europea desde entonces. En sus primeros años llegó a ser un habitual en la Euroleague, una época en la que se sitúa la camiseta de hoy (2005 a 2011) y en la que Deutsche Bank, que sucedío a Opel, precedió a Fraport como mecenas. Históricamente sus camisetas siempre se han teñido de un azul eléctrico, excepto durante el período de Opel que usaron el negro, desde su creación; dejando el color blanco como equipación secundaria. Así que viendo la buena racha de resultados que atraviesan desde su creación no es de extrañar que prolonguen su idilio con el azul. Para frikis como yo, aquí tenéis la gesta.
Como ya habéis deducido el baloncesto teutón no tiene una larga tradición, es por eso que el gran público solo conoce a Nowitzki. Pero Alemania tiene más ídolos y uno de ellos es Pascal Roller, quizás el mejor base de la selección germana en sus éxitos más recientes, medalla de plata y bronce. Por ende, también es un mito del club, que le retiró el número 11 (algo no tan habitual en Europa como en los States) y celebró un partido homenaje con jugadores y amigos del base. Aunque pueda sonar raro se inició en clases de ballet algo que según él le ayudó a moverse por la pista; comenzó a destacar con el Friburgo, donde coincidió con otro clásico nacional como Robert Maras; pasó la gran parte de su carrera en Frankfurt, y eso que se rumoreaba que tuvo una oferta del Barça. 7 veces All Star en la Beko Basketball Bundesliga, jugador del año 2004... y un premio con su nombre, el Most Likely Player que pasó a llamarse Pascal Roller Award gracias a su imagen pública.
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